ALOPECIA ANDROGENÉTICA FEMENINA
La alopecia androgenética femenina es un tipo caída de pelo que es más frecuente a partir de la menopausia pero también común en mujeres jóvenes. Es menos frecuente que en hombres, pero en las mujeres el impacto psicológico suele ser más significativo.
Tratamiento alopecia androgenética femenina
El tratamiento de la alopecia androgenética tiene como objetivo por un lado disminuir el impacto de las hormonas sobre el folículo piloso y por otro mejorar el crecimiento del cabello con el fin de lograr mejoras estéticas.
En mujeres en edad fértil es muy importante tener en cuenta que muchos de los tratamientos para la alopecia androgenética están contraindicados en el embarazo.
Actualmente contamos con tratamientos tópicos, inyectados y orales para la alopecia androgénetica femenina, entre los que se encuentran el minoxidil tópico y oral, los antiandrogenos orales, la mesoterapia con dutasteride o el plasma rico en plaquetas.
Resolvemos tus dudas sobre la alopecia androgenética femenina
La causa de la alopecia androgenética en mujeres es una combinación de factores genéticos existiendo predisposición familiar en ciertas personas y factores hormonales. Los factores hormonales no necesariamente deben manifestarse con alteraciones de los niveles normales analíticos, como puede ocurrir en el caso del síndrome de ovario poliquístico, sino que también puede aparecer en mujeres con niveles hormonales normales. Esto ocurre porque en ocasiones el folículo piloso es más sensible a los andrógenos aunque los niveles de éstos no estén alterados.
Se observa un adelgazamiento del pelo, ya sea en la zona superior del cuero cabelludo o de forma difusa en toda la cabeza, a este proceso se le denomina miniaturización En muchos casos, se observa un ensanchamiento en la linea central del cabello, que se expande como un patrón en forma de árbol de Navidad. En otras mujeres, pueden aparecer una perdida de pelo en zona frontal que recuerda a las entradas de la alopecia androgenética masculina, y en otras, la afectación abarca toda la zona superior de la cabeza.
La alopecia androgenética se diagnostica generalmente con la exploración clínica y con la ayuda de la tricoscopia en casos iniciales, ya que en mujeres los cambios son más sutiles en comparación con los varones. Se va a observan miniaturización del cabello, disminución de la densidad capilar y tallos pilosos de grosores heterogéneos. Para el seguimiento, resulta crucial contar con un control digital fotográfico y tricoscópico.
En mujeres suele ser necesaria la realización de analítica de sangre para descartar alteraciones hormonales o déficit nutricionales asociados.